martes, 15 de noviembre de 2011

Los 7 pecados capitales de hoy.

Los 7 pecados capitales son las 7 enfermedades más frecuentes que padece el ser humano en el mundo actual. Son trastornos que se convierten en enfermedad cuando tu vida se ve envuelta en ella, la enfermedad es la que conduce tu vida y se apodera de ti. Vamos a hablar de los 7 pecados capitales por orden:
La Lujuria: Actualmente a la lujuria se le llama Adicción al sexo. Antes no se llamaba así, se llamaba ninfomanía, ya que la mujer era la que sufría este padecimiento, pero por puro machismo. Ninfas que prestaban estos servicios. Ahora no hay distinción de sexos. Ahora es una enfermedad psiquiátrica a tratar.
La gula: La gula no es más que un trastorno alimenticio. Una anorexia que conlleva a una bulimia. Esto se trata hoy en día. El vicio de comer por sustituir cualquier carencia se cura o se controla  con la psiquiatría.
La avaricia: Es el deseo de tener absolutamente todo sin control alguno, es un trastorno obsesivo compulsivo que al enfermo no le importaría cometer injusticias con tal de acaparar. Los avaros tienen miedo a la carencia y a perderlo todo. Hoy en día bajo ese compartamiento compulsivo podría estar escondida la adicción al trabajo. Hay unas cuantos motivos para   hacerse adicto al trabajo,  una de ellos es el poder y una vez conseguido ese poder este tipo se deshumaniza. En realidad nunca quiso a nadie.
La pereza: La pereza, creo yo, es una depresión. Cuando la persona no se quiere levantar, sólo quiere dormir y está cansado, es una depresión que se trata con fármacos y se cura. Es un estado transitorio por una causa, aunque existen depresivos crónicos, sin causa específica.
La ira: La ira es una rabia incontrolable por algo que te atañe, pero no tanto. Puede ser un caso de bipolaridad la que conduce a tanta ira por algo tan ingenuo. previamente cargado de situaciones crispantes. Para la ira hay tratamientos psiquiátricos de aceptación. Para la bipolaridad también hay tratamiento´
La envidia: La envidia para mi es la baja autoestima, que nos hace destrozar todo lo que consideramos bueno que no tenemos y de paso lo queremos. Generalmente este individuo tiene envidia de un ostentoso. Y dicho de paso de un soberbio. Este individuo envidia al soberbio porque le ve fuerte y poderoso.
La soberbia:  Una deformación de como te ves a ti mismo, una distorsión de tu personalidad. Te ves dios. Normalmente el soberbio es un tipo que sí, que en algún momento de su vida fué valorado y que no supo asimilarlo con normalidad, a raíz de aquel "momento"  trata a los demás con distancia y por encima de todos. Un individuo sin moral... no me atrevo de tratarlo de psicópata, pero algo tiene de locura este comportamiento. 
Por último voy a destacar que nadie se libra de los 7 pecados capitales, que todos tenemos algo de ellos. 
Que por ellos la religión castiga y la ciencia cura o lo intenta. Hay muchos más de 7 pecados obviamente.





jueves, 10 de noviembre de 2011

Cielo, Infierno y Mundo

¿Qué es realmente el cielo? Irse al cielo. Supogamos que todo existe. Dicen que en el cielo te aburres, depende. También dicen que  Facebook es para cotillear. A mi no me parece que sea para cotillear, a mi me parece que es para aprender.Que cada uno se fabrica su propio Facebook. Si no tienes ningún interés por nada, tu Facebook será pobre y aburrido. Claro está que el cielo tendría que fabricarmelo yo. Pasármelo bien como yo considere. Para mi pasarlo bien es estar tranquilo. Crear tranquilo. Dormir tranquilo. Leer tranquilo. Comer tranquilo. Fumar mis cigarros tranquilo. Trabajar tranquilo. Beber mis cervezas tranquilo. Tener una charla tranquilo. Eso es el cielo. Imaginen el Infierno. Tengo que estar constantemente en orgías, emborrachándome, drogándome, insultando, faltando el respeto, delinquiendo, agrediendo, tirándome a la mujer del prójimo, atiborrándome a pasteles, mil y un pecados incontrolables y todo esto corriendo por si te ataca uno que se le antojó . Eso que dicen las personas muchas veces: "prefiero ir al infierno que al cielo, el cielo es un coñazo" Es que en el infierno todo cabe, es el caos total, no puedes ni siquiera fabricarlo tú, te lo imponen. No hay esa disciplina que tu quisieras. En realidad el infierno se parece al mundo terrenal. Es idéntico. Todo ocurre aquí. Para que quieres ir al infierno a divertirte si ya se puede hacer en esta vida tranquilamente. Yo en el infierno viviría acojonado. Como aquí. Pero por lo menos sabes que tienes tu casa, que la vida está en tu cama, tu casa y tu sofá. Que el cielo está aquí dentro. Abrir la puerta y salir al mundo, eso es otro cantar.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Las Mujeres

Esto es bíblico. Me lo contó una mujer. Tuvieron una reunión de amigas. Cañita a cañita se fueron calentando los corazones. Se fueron aligerando las palabras y los pensamientos. Poco a poco y estudiando la situación, esta mujer se dio cuenta que podía dar rienda suelta a su relato. Eran amigas. Amigas de verdad. 
Todas ellas habían tenido una imaginación desbordante hacia un hombre que no era su marido. Ellas imaginaban sus cosas felices. Soñaban que engañaban al marido. Que a hurtadillas hacían esas cosas tan deliciosas. Podían engañar a su marido sin consecuencias. Felices. Ellas querían tener esa aventura pero que luego desapareciese como una pompa. Tenerla pero no. Tener esa aventura sin el coñazo del remordimiento. No me contó lo que se imaginaban. Para eso estaba yo, para imaginármelo. Pero ninguna de ellas engañó a su marido nunca, aunque ganas no les faltaron. Son buenas esposas, buenas madres, todas con hijos...mejor no pensar en aventuras cuando ves la cara de los niños por ahí. Pero las mujeres son así. Se enamoran y se desenamoran con una facilidad tremenda. Viven enamoradas. Yo creo que las mujeres quieren estar siempre en ese estado de locura. Siempre quieren que las abraces, las beses, las mimes, tengas detalles, le traigas un regalito, la mires con cariño y la desees siempre y como nosotros, los tíos, hacemos eso sólo al principio... Pues sucede lo que tiene que suceder, que se imaginan lo mejor con otros. Creo que empezaré a preocuparme más. No vaya a  ser que se imaginen cosas sin mi.

lunes, 7 de noviembre de 2011

Quedar bien

Otra de las cosas que no comprendo es que necesidad tiene el ser humano en  "quedar bien", si me dijeran, "tengo que quedar bien, ante el Tribunal Supremo, con una defensa contundente y declararme inocente ante el juez" entiendo, pero tener que quedar bien ante una estupidez como, "no hombre te invito yo" " No! yo" "No , hombre no! yo" . O por ejemplo otra muy interesante, es que redondeamos los precios, si yo te voy a comprar el regalo para un amigo, digamos una colonia cara, la broma son 52€ y como no tienes suelto, te digo: tranquilo, dame 50€ y así nos pasamos la vida, perdiendo en vez de ganando. A mi no me pasan esas cosas. Es verdad que en el tema del alterne todos pagamos una ronda o lo que sea. Pero a lo que me refiero con quedar bien, no es educación, no, ese es otro tema. Voy a mandar un ramo de flores a menganita que acaba de parir, a esa menganita sólo la viste una vez, pero es la mujer del jefe. Esas cosas que hacemos que no sirven para nada. Nadie te va a ascender por un ramo de flores, el tuyo se perdió  junto con los otros 20 más que mandaron tipos como tú.
Voy a felicitar a menganito, no vaya ser que se ofenda y no me invité a la fiesta que se hace a finales de año. Mejor si no te llama, no ves que si le interesas te va a llamar de todas las maneras, con e-mail, sin e-mail, por teléfono fijo, teléfono móvil, carta etc.... Cuando interesas, interesas. No hay que forzar la situación, para que comprometer a que te sonrían y te hagan gracias. La vida no está para esas perdidas de tiempo. Nos queremos o no nos queremos y no hay mas. Me necesitas o no me necesitas.

sábado, 5 de noviembre de 2011

Ropa enfermante

No entiendo porque los hombres nos compramos chaquetas o pantalones tipo safari si en la vida iremos a ni uno. ¿Será por el color tan discreto que suele tener ese tipo de vestimenta? Esos colores beiges o caquis, color selva o color Sabana, son colores para pasar desapercibido sin que ningún animal te ataque. Se supone. Lo malo es cuando esta ropa la usas en la ciudad, donde no hay animales, hay personas, no sabemos que tipo de personas, pero hay personas. 
Te suena el móvil y no sabes en que bolsillo de tu chaleco o pantalón lo has metido, claro tienes tantos bolsos y cada uno de un  tamaño diferente y en diferentes sitios, que para encontrar el móvil o cualquier cosa acabamos desesperados,  tú, yo y el resto. ¿Qué resulta que te apetece fumar? tampoco encuentras el tabaco ni el mechero. Este tipo de vestimenta limíta toda espontáneidad y naturalidad a la situación. Te pareces más a una película de Peter Sellers que a ti mismo. Esto de usar ropa que no ha lugar es incómodo. ¿Por qué nos dejaremos llevar por las modas? El pantalón de trabajo, el de constucción, ese pantalón es para trabajar encima de un andamio señores, tiene mil bolsos para volverte más loco. Martillo, destornillador, nivelador etc. Para tener ese tipo de vestimentas hay que ser muy organizado y no olvidarte en donde metiste cada cosa. Yo prefiero un vaquero que ya tiene 5 bolsos, contando con el pequeño de las monedas, me parece suficiente. Se supone que el pantalón ese debería ser práctico, pues no caballeros, es tremendamente incómodo. Bueno yo me volvería loco, subido a  un andamio, cogado de un arnés, mil cosas en diferentes sitios y casco, creo que se me caería todo y pondría en peligro la vida de muchos transeúntes. Creo que se me caería hasta el casco y si me descuido hasta yo. 

viernes, 4 de noviembre de 2011

Los nervios delatan

Esperar siempre fue espantoso. Nos pasamos la vida esperando, que si el bus, que si el embarazo, que si el novio o la novia....parece que todo se basa en la espera. Esta vida es una espera constante. Esperas tu turno. A ver cuándo nos toca el premio. A ver si me llaman para un trabajo. A ver si me llaman por teléfono para empezar a funcionar etc...¡Por qué no hay más fluidez en las cosas? No importa esperar nuestro momento, nuestro turno, como en la carnicería y que nadie se cuele por dios! Hoy y ahora nos toca a nosotros. No se me ocurre más, esperando esperando....bueno la verdad es que lo que yo espero, no creo que sea eterno. Pero la afonía no me la quita nadie. Me dijo el médico de las alergias que esa afonía era nerviosa. Yo pensé que era el frío. Seguiremos esperando a que nos toque la lotería, sea cual sea, siempre que sea buena.